Advertido por Sebastián Bassi, ayer descubro que en la edición web del diario La Nación una informativa nota de color titulada “¿Qué es una katana y para qué se la utiliza” era en realidad una burda copia del artículo de Wikipedia Catana.
En efecto, apenas una introducción made in La Nación y algunas adaptaciones menores, tal como haría cualquier estudiante haragán de la escuela secundaria. El resto reproducía palabra por palabra el artículo de la enciclopedia.
Lo que el periodista probablemente ignoraba (no así el estudiante que abusa del copiar y pegar) es que así como es de fácil encontrar información, pintarla con el mouse y con dos clicks trasladarla a nuestro procesador de textos, así de fácil es descubrir el plagio. La Nación debería haberlo aprendido: hace apenas cinco días debió pedir disculpas por plagiar descaradamente a “La gente anda diciendo”.
Si las excusas presentadas en este caso eran algo patéticas, lo del artículo de la katana es injustificable. Porque si La Nación desea utilizar una copia de un artículo de Wikipedia puede hacerlo sin necesidad de hacerlo pasar por un texto propio.
Todo el contenido de Wikipedia tiene una licencia Creative Commons que permite copiarlo, distribuirlo y adaptarlo, con la única exigencia de reconocimiento de la autoría y que esa copia o adaptación tenga la misma licencia.
La autoría puede sonar complejo, ya que Wikipedia es una obra que tiene miles de autores. Pero alcanza con enlazar el historial del artículo donde figuran cada una de las sucesivas ediciones y sus autores. Por ejemplo, indicando que “este artículo ha sido escrito por colaboradores de Wikipedia“.
Es decir que con un enlace al artículo original, un enlace a la licencia (declarando que la versión copiada también se distribuye de esa manera) y un enlace al historial, alcanza. Y a diferencia del estudiante haragán, con eso es suficiente para recibir la aprobación de los wikipedistas. No es mucho pedir, La Nación, a ver si se ponen las pilas.