Cuando el lider del grupo Guardia Tanguera señaló que debíamos olvidarnos del “paso básico”, debo confesar que me sentí aliviado: el “paso básico” en el tango es una figura que consta de ocho pasos, por más básico que sea se empeña en enredar la piernas torpes de este servidor y fracasa antes de comenzar todo intento de recibirme de porteño.
Pero esta vez, en el patio del rectorado de la Universidad Nacional de La Plata, el profe arrancó derribando un mito: “El paso básico”, dijo, “no es obligatorio, es sólo una figura más de las que hay tantas en el tango. De hecho”, agregó, “es muy difícil utilizar el paso básico en una milonga concurrida: uno suele estar más concentrado en no chocar con otras parejas”.
“Magnífico”, pensé, “esto es tango real y no mera coreografía”, como si ése hubiera sido el motivo de anteriores fracasos y no mi infinita torpeza. Algunos años atrás un profesor de tango me había largado un discurso indignado donde daba cuenta de las diferencias entre el tango y el feminismo. Parece que en mi frustrado intento de realizar la maldita coreografía del paso básico no caía en la cuenta que relegaba la conducción en mi pareja… y eso, en el tango, es crimen imperdonable.
El tipo insistió: “lo único imprescindible para bailar tango es saber caminar el salón”. Y a partir de allí comenzó a dar instrucciones simples seguidas de ejercicios donde se ponían en práctica esas sencillas instrucciones. Pero lo realmente curioso es que a la media hora me encontraba bailando tango -pobremente, claro, pero tango al fin.
Guardia Tanguera es una asociación que disfruta con esto del tango -bailando y enseñando- y suelen encontrarse dando clases gratis o a la gorra en distintos lugares de La Plata, recomiendo mirar en todo caso los suplementos de cultura y espectáculos de los diarios locales. Especialmente recomendado para torpes y tímidos.
DESDE CARACAS VENEZUELA ,,, LO TOMARE EN CUENTA Y A DISFRUTAR DE LAS MILONGAS